La falta de sueño puede causar problemas de la memoria, atención, control de las emociones, irritabilidad y otros.
Además, aumenta el riesgo de enfermedades crónicas como diabetes, enfermedades cardiovasculares, obesidad y depresión. También puede afectar nuestro sistema inmunológico, reduciendo la capacidad para combatir infecciones y enfermedades.
Algunas formas de inducir nuestro sueño, son:
Ventilar la habitación
Mantener una temperatura adecuada
Almohada y colchón
Reemplace tus almohadas por unas hipoalergénicas, considere usar una almohada para colocarla en el cuello cuando duerma de lado, o use una almohada para abrazarla al cuerpo y colocarla entre las rodillas para alinear la espalda y los hombros al dormir.
De igual forma, revise que su colchón sea firme y no demasiado blando. Por último, trate de dormir en posición fetal: es muy relajante y recomendable.
Tomar el sol en la mañana
Ayudará a dormir más temprano y a regular su ciclo del cortisol y su reloj biológico.
Controle su horario
Planee su sueño en el calendario, con unas 7 a 8 horas de sueño.
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